jueves, 14 de marzo de 2019

Treinta y dos: Un día sin redes sociales.

Durante el día de hoy, las redes sociales de propiedad del señor Mark Zuckerberg -Facebook, WhatsApp e Instagram- sufrieron una caída a nivel mundial, y por supuesto, muchas personas que dependen en exceso de ellas sintieron algo muy parecido a un síndrome de abstinencia.  Otros tantos, asumieron tal impase con serenidad y continuaron con sus vidas normales.

Por mi parte, debía entregar un trabajo muy denso de mi maestría, y como en ocasiones no entendía, me refugiaba a ratos en otras actividades.  Pude, aunque sufrí.  Pero hoy, este día que se acaba, fue distinto para todos, quizá anormal.  ¿Fue más productivo?  Quizá también.

Hoy seguí aprendiendo a no depender tanto de las redes sociales.  Lo necesito.  Mis deberes lo exigen y debo ser correspondiente.  Debo mantenerme en esa exigencia de quitarle la dependencia tecnológica a mis estudiantes.  Y bueno...  Este sitio donde me encuentro me pide de vez en cuando disfrutarlo.

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