jueves, 2 de junio de 2016

México 1986: El camino de Argentina (Parte I - Corea del Sur)

En este año se conmemoran treinta años de la realización del Mundial de Fútbol realizado en México en 1986, evento que originalmente debía realizar Colombia, pero gracias a una declaración desafortunada e infame del presidente de esa época -Belisario Betancur- el país renunció al derecho de realizarlo.  Acto seguido, México, un país que ha sufrido de todo, y que en el año inmediatamente anterior sufrió un terremoto que afectó gravemente a su capital, tuvo las agallas suficientes para realizar uno de los mundiales más recordados de toda la historia del fútbol, no solo por su colorido, sino porque una persona en especial se consagró como uno de los mejores jugadores de este deporte, si no cabría considerarle como el mejor de todos los que han existido.

Después de superar una dura eliminatoria contra Perú, Colombia y Venezuela, Argentina clasificó directamente a México perdiendo solo un partido, ante los peruanos.  Argentina fue sorteada en el Grupo A, el grupo del campeón vigente, Italia, junto a las selecciones de Bulgaria y de Corea del Sur.  Italia y Bulgaria empataron en el partido inaugural, el 31 de Mayo, a un gol, y dejando serias dudas sobre el desempeño de la squadra azzurra.

Argentina iniciaría su participación dos días después, en el Estadio Olímpico Universitario, casa de los Pumas de la Universidad Nacional Autónoma de México.  El rival, el seleccionado surcoreano, no se clasificaba a un mundial desde la edición de 1954.  Los gauchos afrontaron una concienzuda preparación en tierras aztecas desde el 5 de Mayo, con el fin de adaptarse a la altura de Ciudad de México y poder desplazarse a otras ciudades sin sufrir contratiempo alguno con el aspecto de la temperatura; pero no contaban con las presiones extrafutbolísticas que surgieron desde la misma eliminatoria, desde choques entre César Luis Menotti y Carlos Salvador Bilardo -ex-técnico y técnico para ese mundial respectivamente-, desempeño irregular en los partidos amistosos previos -incluyendo una derrota con la entonces desconocida selección noruega- y algunas situaciones de convivencia entre los mismos jugadores.

En ese mediodía mexicano, Argentina inició su camino, y muy temprano, a los seis minutos, Jorge Valdano recibe un pase de cabeza sin presión alguna dentro del área coreana y fusila a Yun-Kyo Oh.  Pintaba fácil el partido, y aún más lo era cuando Óscar Ruggeri, conectando de cabeza un buen tiro libre al área, anotaba al minuto 18 el 2-0 a favor de la albiceleste.  Argentina manejó el partido durante el resto de la primera parte, y apenas transcurrió el primer minuto de la segunda parte, Valdano aprovechó el resultado de un gran lanzamiento de portería realizado por Nery Pumpido, que no fue controlado por los surcoreanos y terminó en un pase de la muerte que no fue cortado por el portero, dejándole el balón a bocajarro al entonces delantero del Real Madrid.

Corea del Sur tuvo tiempo para descontar y anotar su primer gol en los mundiales, ya que Argentina con el 3-0 liquidaba el partido, objetivo que logró en el minuto 73 gracias a un afortunado disparo de Chang-Sun Park, que rozó en un defensor argentino en pleno despegue y desubicó a Pumpido.  Así, la albiceleste debía esperar tres días y viajar a Puebla para encontrarse con Italia mientras que Corea del Sur debía quedarse en Ciudad de México para buscar un resultado ante la entonces nunca vencedora Bulgaria.

Así formaron los equipos:

Argentina: Nery Pumpido; José Luis Brown, Néstor Clausen, Óscar Ruggeri, Óscar Garré; Sergio Batista (Julio Jorge Olarticoechea 75'), Ricardo Giusti, Jorge Burruchaga, Diego Maradona; Pedro Pablo Pasculli (Carlos Tapia '74), Jorge Valdano.  Director Técnico: Carlos Salvador Bilardo.

Corea del Sur: Yun-Kyo Oh; Kyung-Hoon Park, Yong-Hwan Chung, Pyung-Seok Kim (Kwang-Rae Cho '23), Min-Kook Cho, Yong-Se Kim (Byung-Joo Byun '46); Jung-Moo Huh (amonestado '44), Joo-Sung Kim, Chang-Sung Park (amonestado '50); Soon-Ho Choi, Bum-Kun Cha.

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